Hoy la Araucanía es la región con mayores niveles de pobreza infantil de Chile, donde uno de cada tres niños vive en pobreza.

Es la región donde el estado de derecho ha fracasado en forma reiterada en su obligación de garantizar la paz. 

Tengo la convicción de que a pesar de todas esas dificultades es, sin lugar a dudas, la región con mayor potencial cultural y de desarrollo social en nuestro país.

Desde el Senado representaré a la región por las siguientes razones:

En La Araucanía sólo un 46,6% de las personas recibieron educación básica, mientras sólo la mitad de los niños entre 0 y 5 años asisten al jardín infantil.

En zonas rurales, un 44,1% de los niños entre 4 a 6 años de edad no asiste al colegio o al jardín infantil por las dificultades en el traslado y acceso a matricula.

Todos nacemos llenos de talentos, pero solo algunos tienen la suerte de hacerlo en un entorno que los ayuda a desplegarlos. Nosotros elegimos a los niños. Queremos nivelar la cancha ahí donde está el origen de la desigualdad injusta: los primeros 6 años de vida. 

Durante 2010, solo días después de la catástrofe, Felipe asumió con solo 32 años como Ministro de Mideplan, siendo el encargado de la emergencia después del terremoto junto al Ministro de Interior.

Creó el Ingreso Ético Familiar, un programa que tiene por objetivo la superación de la extrema pobreza, dándole apoyo social y herramientas laborales a las personas que más lo necesitan.

En 2011 asume como Delegado Presidencial de Aldeas y Campamentos, volviendo al núcleo de las urgencias sociales y continuando el legado para erradicar la pobreza que inició su padre como ministro.